Mercados Navideños de la República Checa

Mercados Navideños de la República Checa

Una de las cosas que puedes visitar si vienes a Praga durante el Adviento son los Mercados Navideños de la República Checa. Encontrarás muchos puestecillos iluminados con olor a canela, trdelník, carnes asadas y salchichas. Donde puedes comprar decoración navideña para tu casa como muérdago, coronas de Aviento y bolas para tu árbol de Navidad. Pero también puedes llevarte algún pequeño recuerdo en tu maleta.

Los encuentras en todas las principales ciudades del país, pero sin duda el mercado de Navidad más grande de la República Checa, es el de la plaza de la Ciudad Vieja de Praga.

Pero en todos, y cada uno de ellos además de escuchar villancicos, puedes tomarte un vino caliente o un grog que aun te alegrará más las Navidades.

Desde hace muchos siglos los mercados navideños han sido parte de las tradiciones navideñas. Cuando por el siglo XIII tuvieron lugar por primera vez los mercados vieneses, y que con el tiempo han ido evolucionado. Antiguamente los mercados navideños de la Edad Media servían para vender alimentos, ropa de abrigo y otras necesidades necesarias para sobrevivir los fríos inviernos.

Origen de los mercados navideños

Su origen se remonta a la Edad Media cuando se extendieron gradualmente desde Alemania y Austria al resto del mundo. Los primeros mercados navideños fueron los Mercados de Viena, que se celebran desde 1294, los mercados de Bautzen en 1384 y los Mercados de Dresde, que tienen una tradición desde 1434.

Y poco a poco se fueron extendiendo por todas las ciudades importantes de Europa. Los más famosos fueron los mercados navideños de Londres, Dresde , Berlín, San Petersburgo y Dijon. Hasta que llegaron a Praga, que inicialmente se celebraban solo en la Plaza de la Ciudad Vieja.

Comenzaban más tarde que ahora, ya que se inauguraban el segundo domingo antes de las vacaciones de Navidad, durando al menos catorce días. Y acabó siendo un gran evento social donde se reunieron amigos y conocidos.

Como eran los mercados navideños

En los mercados de Navidad podías comprar comida, bebidas, dulces, artículos de primera necesidad. Así como herramientas, arneses para caballos, hachas y animales para trabajar tus tierras.

Y ya entonces, como ahora, también podías comprar artículos navideños como belenes. Ya que en ese momento, casi todos los hogares tenían un belén, pero solo las familias adineradas podían permitirse un árbol de Navidad. Los belenes eran de madera, e incluso de pan. Estos belenes de pan se hacían con una mezcla preparada con harina de centeno, serrín de madera y agua con cola.

Ambiente en los mercados navideños

Los mercados eran muy bulliciosos y alegres, en los que participaban acróbatas, malabaristas, cantantes callejeros y músicos. Cantantes que interpretaban canciones religiosas, folclóricas y profanas, muchas veces acompañadas de arpas, y actuaciones o e imágenes que representaban la trama de las canciones. Donde además era posible comprar las letras impresas de estas y cantar junto con los artistas.

Por supuesto también había representaciones de marionetas, para contar la historia del nacimiento de Jesús. Y como no, en la Plaza de la Ciudad Vieja,  la obra del Doctor Fausto, quien fue llevado por el diablo.

Otras atracciones eran el campo de tiro y los museos de curiosidades. En los museos, la gente podía ver, por ejemplo, elefantes y leones o preguntar sobre su futuro a las videntes.

Y como hoy, eran días de comer y beber en abundancia, y encontrabas brochetas, frutos secos y dulces como el mazapán. Además de beber vino caliente, grog y cerveza en abundancia.

Si quieres saber más sobre los Mercados Navideños de la República Checa, solo tienes continuar leyendo y disfrutando conmigo.

Si te gusta Navidades en Praga ayúdame para que siga escribiendo sobre estas celebraciones tan bonitas. Muchas gracias

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